Aceite de oliva en el parabrisas: descubre para qué sirve

Un aspecto muy importante, pero a menudo subestimado, es el que se refiere al parabrisas limpio del automóvil. De hecho, es fundamental que este elemento esté siempre libre de polvo, suciedad, escombros y cualquier otra impureza. ¿Cómo resolver eficazmente este problema?

Siempre se debe garantizar una visibilidad óptima durante la conducción en cualquier condición climática. Los limpiaparabrisas en funcionamiento podrán barrer las gotas de lluvia en días con condiciones adversas. Los limpiaparabrisas, combinados con la acción del líquido lavaparabrisas, también te permitirán eliminar la suciedad y el polvo de las ventanas.

En algunos casos, sin embargo, estos elementos no podrán resolver completamente los problemas de cada situación. No sólo el parabrisas, sino también las lunas laterales y la luneta trasera deben estar siempre perfectamente limpias.

Los cristales o ventanas a menudo pueden empañarse debido a la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior. Un buen uso del aire acondicionado resolverá mejor este problema. Para las manchas más rebeldes en el cristal, en cambio, necesitarás limpiaparabrisas, líquido lavaparabrisas y, en las situaciones más impermeables, incluso otros elementos específicos.

En este artículo, veremos cómo el aceite de oliva será particularmente útil para eliminar la suciedad más resistente del parabrisas y todas las demás ventanas de su automóvil. Aquí tienes todos los detalles al respecto.

La importancia de la acción del aceite de oliva en el parabrisas del coche

Las escobillas limpiaparabrisas corren el riesgo de dañarse con el tiempo, comprometiendo su funcionamiento regular. Habrá que cambiarlos una vez al año, de media. Mucho, sin embargo, dependerá del grado de uso del automóvil y de estos accesorios.

Los limpiaparabrisas estropeados te harán correr el riesgo de crear molestas rayas en el cristal. Los halos y las manchas permanecerán, a pesar del paso de estos elementos y de la acción del líquido lavaparabrisas. Su visibilidad, por lo tanto, podría verse seriamente comprometida.

Esto sería un peligro real para ti y para todas las demás personas presentes en la calle en ese preciso momento. Aquí, sin embargo, es que el aceite de oliva puede venir a tu rescate en dos casos específicos. El primero hace referencia precisamente a los limpiaparabrisas, mientras que el segundo al parabrisas del coche.

El aceite de oliva servirá para devolver el vigor a las escobillas secas. Extender unas gotas de aceite sobre un paño de microfibra y luego pasar este elemento por los cepillos permitirá mejorar notablemente la situación. Tendrás que dejar actuar el aceite unas horas y luego retirarlo con otro paño limpio.

Luego rociará agua en el parabrisas y operará los limpiaparabrisas. Es posible que haya prolongado la vida útil de sus limpiaparabrisas. El aceite de oliva, sin embargo, también será muy efectivo en el parabrisas del coche. ¿Como? Aquí está todo lo que necesita saber al respecto.

El aceite solucionará para siempre el problema de las manchas en los cristales

La suciedad intensa en el cristal puede deberse a mil motivos. La presencia de polvo, manchas de excrementos de pájaros, resina caída de árboles y otras situaciones similares pueden contribuir seriamente a la suciedad persistente en el cristal. En algunos casos, será muy difícil que la situación vuelva a ser nueva.

Si quieres eliminar la suciedad más rebelde, las manchas en los cristales y las posibles rayas provocadas por la acción de los limpiaparabrisas, el aceite de oliva vuelve a venir en tu ayuda. Le permitirá resolver efectivamente la situación.

Basta con frotar aceite de oliva enérgicamente sobre la parte sucia, utilizando un paño de microfibra. Esta acción eliminará la resina del cristal o cualquier elemento que haya provocado la presencia de suciedad intensa. En algunos casos, de hecho, la acción del agua y el jabón puede no ser suficiente.

El aceite de oliva, empapado en el paño, también se puede untar en el parabrisas como medida preventiva. Notarás como la suciedad arraigará con mucha menos intensidad sobre el cristal. El consejo, sin embargo, es no excederse con la cantidad de aceite. En este caso, de hecho, su acción podría ser contraproducente. El exceso de aceite también será difícil de eliminar. Por lo tanto, incluso unas pocas gotas serán suficientes.

El aceite de oliva es muy útil, por tanto, en estas situaciones. Otro elemento que puedes utilizar será el «famoso» bicarbonato de sodio, muy importante para eliminar la suciedad más rebelde.