Viajar con niños en el coche: 7 remedios contra el mareo

Cuando realizas viajes largos con niños en el coche, especialmente si son muy pequeños, tienes que lidiar con algunos inconvenientes. Entre estos, sin duda está el mareo por movimiento, que afecta a uno de cada tres niños (pero muchos adultos también lo padecen). Un molesto malestar que muchas veces condiciona a las familias a la hora de elegir el destino al que llegar, pero que se puede mantener a raya siguiendo 7 sencillos remedios.

Causas y síntomas del mareo en el coche los niños

Los niños, al igual que los adultos, pueden experimentar mareos en el coche. Esto se conoce como cinetosis, un término que se utiliza para describir una sensación de náuseas y malestar que puede producirse cuando se viaja en coche, tren, avión u otro tipo de transporte.

¿Por qué los niños se marean?

El mareo en el coche se produce cuando el cerebro recibe información contradictoria de los sistemas sensoriales que controlan la percepción del movimiento y el equilibrio. Este fenómeno puede ser causado por la hipersensibilidad del centro de equilibrio, situado en el oído interno. Este centro de equilibrio, o sistema vestibular, nos ayuda a mantener nuestra orientación y equilibrio. Durante un viaje en coche, los movimientos constantes y repetitivos, así como los estímulos visuales excesivos, pueden sobrecargar este sistema, resultando en una sensación de mareo.

En términos más sencillos, cuando un niño está en un coche en movimiento, sus ojos pueden ver que está sentado y parece estar quieto, pero su oído interno puede sentir el movimiento del coche. Este conflicto de información puede confundir al cerebro y causar mareo.

Síntomas del mareo del coche

Los síntomas del mareo en el coche pueden variar de un niño a otro, pero generalmente incluyen una serie de signos físicos y cambios de comportamiento. Los primeros signos pueden incluir palidez, bostezos frecuentes y una sensación general de malestar. A medida que el mareo progresa, puede surgir una sensación de náuseas, acompañada de sudores fríos.

En casos más severos, estos síntomas pueden llegar hasta el vómito. Sin embargo, no es raro que el niño se sienta mejor después de vomitar, ya que esto puede aliviar la presión y el malestar en el estómago. No es necesario alarmarse si el niño quiere vomitar; en realidad, puede ser útil permitirles hacerlo en un entorno controlado para aliviar sus síntomas.

El mareo del coche en los niños: los remedios a seguir

Una vez explicadas las causas, pasemos a los remedios para el mareo en los niños como prometimos. Hay 7 reglas simples pero efectivas y sobre todo naturales:

1. Trata de programar el viaje en coche cuando el niño todavía tiene sueño, ya que esto puede ayudar a reducir la sensibilidad al mareo.
2. Mantén una conducción suave, evitando aceleraciones o desaceleraciones repentinas, especialmente en curvas.
3. Evita los olores fuertes, como la gasolina en las estaciones de servicio, o el aire viciado en el coche.
4. Ofrece refrigerios salados frecuentes tanto antes como durante el viaje, acompañados de pequeños sorbos de agua o té.
5. Mantén al niño distraído y entretenido con música o juegos para que se olvide del movimiento.
6. Usa el aire acondicionado para mantener fresco el interior del vehículo, ya que el calor puede aumentar la sensibilidad al mareo.
7. Haz paradas cada 2 a 3 horas para que todos puedan estirarse y tomar un descanso.

Dimenhidrinato: para los casos mas difíciles

Siguiendo estos consejos, el viaje con niños en coche debería ir sobre ruedas. Sin embargo, los médicos recomiendan, para los casos más difíciles, también el uso de medicamentos a base de dimenhidrinato, una molécula utilizada en caso de náuseas y vértigo, por lo que también es eficaz para el mareo.

El dimenhidrinato se puede tomar en cápsulas blandas y, por lo tanto, debe tomarse aproximadamente media hora antes de la salida. O en forma de chicle, y en este caso debe tomarse tan pronto como aparezcan los síntomas del mareo. Advertencia: el dimenhidrinato no es adecuado para niños menores de 2 años.