El aumento de peso y tamaño de los coches tiene un impacto negativo en el medio ambiente

El tamaño y el peso de un automóvil son un factor que no debe subestimarse al evaluar el impacto ambiental del vehículo: la confirmación proviene de un nuevo informe de Green NCAP que, después de presentar un nuevo mecanismo de prueba de vehículos basado en el ciclo de vida del producto durante 2022, ahora hace balance de la situación de los resultados obtenidos en los ensayos realizados el pasado año.

Entre los resultados que surgieron de la encuesta está el «problema» que representa la tendencia del mercado automotor a ofrecer coches cada vez más grandes y pesados. Este tipo de vehículo, de hecho, tiene un mayor consumo (de combustible o electricidad, en función del motor utilizado) así como un mayor impacto ambiental vinculado al proceso de producción.

Los coches pesados tienen un mayor impacto ambiental

El nuevo informe de Green NCAP (un programa de evaluación de vehículos ecológicos respaldado por los gobiernos europeos) arroja luz sobre uno de los problemas actuales del mercado de los vehículos de cuatro ruedas. El sector se orienta cada vez más hacia la electrificación, a pesar de las dudas sobre el cese de la venta de coches de combustión interna (ICE) en la UE a partir de 2035.

El objetivo de reducción de emisiones tiene que hacer frente a varios problemas. Mientras tanto, sin embargo, el «problema» representado por el aumento en el tamaño y el peso de los automóviles surge claramente del estudio de Green NCAP. Neto de parámetros como la eficiencia del motor y la eficiencia aerodinámica (que juegan un papel importante en la determinación del impacto ambiental), Green NCAP revela una clara tendencia para el sector automotriz. Los automóviles más grandes y pesados ​​tienen un impacto significativamente mayor que el promedio, siendo iguales todos los demás factores, lo que requiere más energía a lo largo de su ciclo de vida.

El director técnico, Aleksandar Damyanov, presenta las reflexiones de Green NCAP sobre el tema, subrayando: “Los vehículos eléctricos y la electrificación en general ofrecen un enorme potencial para reducir los gases de efecto invernadero, pero la tendencia cada vez mayor de vehículos más pesados ​​reduce esta perspectiva». Para contrarrestar esto, Green NCAP hace un llamado a los fabricantes para que reduzcan la masa de sus productos e insta a los consumidores a tomar decisiones de compra que tengan en cuenta no solo el tren motriz de sus coches nuevos, sino también su peso.

El informe Green NCAP

Tanto los coches eléctricos como los híbridos o híbridos enchufables, así como el grupo gasolina/diésel/etanol probado por Green NCAP en 2022, muestran el gran impacto de la masa y el tamaño de un automóvil en el medio ambiente. Tanto en términos de energía consumida como de emisiones de gases de efecto invernadero, de hecho, se observa que, con la misma tecnología utilizada para el motor, el impacto ambiental es mayor para los automóviles más grandes.

En particular, son interesantes los datos relativos a los coches eléctricos, donde el impacto de la masa del vehículo es evidente. Los coches eléctricos de grandes dimensiones y, por tanto, con un peso importante tienen que hacer frente a una sostenibilidad medioambiental, a lo largo de todo su ciclo de vida, decididamente inferior a la de los coches eléctricos compactos y ligeros.

No es casualidad que el Mejor Coche de 2022 de Green NCAP sea el «pequeño» Dacia Spring, de 3,73 metros de largo y con una masa total inferior a los 1.000 kilogramos.

El peso medio de los coches sigue aumentando

Green NCAP destaca cómo en los últimos diez años, en el mercado europeo, el peso medio de los vehículos vendidos ha aumentado un +9%. De media, por tanto, los coches pesan 100 kilogramos más. Este aumento está ligado a un aumento del tamaño y de las dimensiones totales, no sólo en longitud sino también en anchura y altura.

La confirmación viene de los datos relativos a las ventas de SUV y Crossover, que se convirtieron en los vehículos más vendidos en Europa en 2022 con 4 millones de unidades distribuidas. Las ventas de SUV compactos se multiplicaron por 4 y las ventas de SUV grandes se multiplicaron por 7.

¿Un problema para nuestro futuro?

En su informe, Green NCAP correlaciona el aumento de tamaño y peso de los coches con el aumento del impacto ambiental, cuantificando este dato.

El aumento del peso medio de 100 kilogramos, según Green NCAP, se traduce en un aumento de unas 1,4 toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero y 5,7 MWh de electricidad utilizada.

Estos datos, por tanto, reducen la eficacia del programa de electrificación que tiene como objetivo final eliminar el impacto de los coches en el medio ambiente, al menos en lo que respecta a las emisiones directas. Coches cada vez más grandes y pesados ​​se traducen inevitablemente en un aumento del impacto medioambiental del sector de las cuatro ruedas.