Cómo saber cuando cambiar discos, pastillas u otros componentes del sistema de frenado

Es tiempo de vacaciones y millones de familias españolas saldrán a las carreteras para llegar a sus lugares de vacaciones favoritos. Tanto si eres amante del mar, como de la montaña o de las ciudades de arte, antes de ponerte en marcha es mejor que te asegures de que el sistema de frenos de tu coche sea totalmente eficiente.

Por eso, hemos intentado contestar a 5 preguntas frecuentes sobre el mantenimiento del sistema de frenos de tu vehículo. Las repuestas que encontrarás a continuación son un recopilatorio de consejos útiles que te ayudarán durante todo el año, pero más aún antes de salir a la carretera.

5 preguntas para saber si tienes que cambiar los frenos del coche

1) El espacio de frenado se reduce

¿Cuánto varía la potencia de frenado y la distancia de frenado (en metros) entre un sistema de frenado perfectamente eficiente y uno al límite de la sustitución obligatoria de discos y pastillas?

La variación no se puede cuantificar en términos generales, ya que depende de muchos factores: el estado de desgaste de los componentes de fricción, el tipo de sistema de frenado y su dimensionamiento así como el vehículo en cuestión. Normalmente, el conductor adapta o compensa automáticamente parte de la pérdida de eficacia por el desgaste de los frenos, variando su estilo de conducción y frenando con el uso del coche.

Es un proceso automático, que se realiza sin que exista una percepción efectiva del mismo; sin embargo, en caso de frenado normal, compensa, al menos parcialmente, la pérdida de eficacia del sistema de frenado.

Por el contrario, en caso de frenada de emergencia o uso en condiciones críticas (descensos helados o nevados), se requiere toda la potencia de frenado del sistema y toda la capacidad de disipación del calor generado. Especialmente en estas situaciones, por lo tanto, un sistema de frenado desgastado mostrará todo su espacio en comparación con un sistema en buenas condiciones. También hay que recordar que los discos desgastados provocan un desgaste o incluso deterioro de las pastillas más rápidamente, y viceversa, esto sucede en el caso de pastillas desgastadas. El desgaste de los componentes, cuando son relativamente nuevos, es mucho menor que cuando ya están muy desgastados. En el sistema desgastado se generan temperaturas más altas con todos los problemas relacionados.

2) Síntomas de que algo va mal

¿Cómo se verifica si un disco ya no es eficiente?

Desafortunadamente, la eficiencia del sistema de frenos no se puede probar fácilmente. Pero es fácil y recomendable estar constantemente pendiente de sus componentes. Es recomendable revisar los frenos cada 15.000/20.000 km pero debe realizarse inmediatamente cuando se presenten fenómenos de vibración. Los principales signos que indican desgaste o deterioro del disco o pastillas son:

• encendido del testigo (si está presente y sólo para los pads, en la imagen abajo);
• ruido durante el frenado;
• presencia de vibraciones;
• presencia de líneas circulares profundas o grietas radiales en la superficie de frenado
• signos de sobrecalentamiento

En algunos casos, el nivel del líquido de frenos también puede proporcionar información útil sobre el desgaste de los discos y las pastillas.

De hecho, cuando las pastillas y los discos se desgastan, el pistón de la pinza de freno tendrá que realizar un mayor recorrido para compensar la pérdida de espesor del disco y/o de la pastilla, absorbiendo a su vez una mayor cantidad de líquido de frenos que hará que baje su nivel.

3) Ojo con las manchas

A veces se ven manchas negras en el borde como si fueran pedazos de pastilla derretida: ¿de qué depende? ¿Es una señal de pastillas de mala calidad o de pastillas excesivamente desgastadas?

Es simplemente el material de fricción consumido durante el frenado. No es una indicación de pastillas de mala calidad o incluso de frenado extremo. Es simplemente el producto del desgaste de los materiales de fricción.

4) ¿Qué tienes que cambiar?

Cada dos cambios de pastillas, muchos también recomiendan cambiar los discos. ¿Es correcto?

Es importante recordar que al reemplazar los discos de freno, también se deben cambiar las pastillas. Por el contrario, es posible sustituir las pastillas sin cambiar los discos de freno, siempre que estos no estén demasiado desgastados (es decir, si el espesor de la superficie de frenado no se aproxima o es inferior al mínimo especificado por el fabricante, indicado en el diámetro exterior). del propio disco).

De hecho, las pastillas se desgastan más rápido que los discos. Normalmente, un juego de pastillas dura la mitad que un disco, por lo que una proporción de 2 a 1 puede considerarse correcta en muchos casos.

5) La sustitución de las pinzas

¿Cuándo, y si, también es necesario reemplazar las pinzas de freno?

La sustitución de las pinzas de freno y demás componentes hidráulicos del sistema de frenado (mangueras, cilindros de freno, bomba de freno) no se produce por desgaste por rozamiento sino por deterioro o rotura accidental. Para esta circunstancia, tu taller te ofrecerá una gama completa de pinzas remanufacturadas, una solución alternativa a la sustitución de las pinzas por piezas nuevas, que no obstante garantiza la misma calidad y seguridad que estas últimas.

De hecho, el proceso de regeneración de la pinza requiere la aplicación de los mismos estándares técnicos rigurosos previstos para el equipo original, la limpieza de la pinza y la sustitución de todos los componentes internos, sujetos a desgaste y deterioro, por componentes totalmente nuevos. Por lo tanto, todas las pinzas están recubiertas con una capa protectora anticorrosión y se someten a pruebas funcionales para garantizar un funcionamiento perfecto.

Además de ser asequibles y fiables, las pinzas de freno remanufacturadas representan una opción ecológica, en línea con las políticas de la empresa basadas en la atención a la reducción del impacto medioambiental, en este caso gracias al reciclaje del cuerpo de la pinza.