Los coches necesitan estar preparados en todo momento porque las exigencias del ritmo de vida actual son cada vez mayores. De esta manera, todos los elementos del coche deben estar a punto, incluyendo los frenos. De hecho, constituyen un elemento esencial para la seguridad de los pasajeros.
Por qué cambiar las pastillas de freno
Las pastillas de freno son las encargadas de crear fricción en el disco y de ralentizar la rotación del mismo, siendo componentes determinantes para que la frenada sea adecuada. Sin embargo, a medida que se van utilizando también se van desgastando y la frenada es peor. Por ello, resulta imprescindible tomar conciencia de que unos frenos en mal estado pueden aumentar la distancia de frenado y esto es algo que no nos podemos permitir.
No obstante, no hay de qué preocuparse porque en este post proporcionamos la solución para cambiar las pastillas de frenos en 8 sencillos pasos. De este modo, lograremos que nuestro coche siga siendo seguro.
Ocho pasos para cambiar las pastillas de freno
Estos son los pasos a los que debemos atender:
- Girar la dirección del coche y aflojar los tornillos de la rueda. Aquí debemos girar la dirección del vehículo según la pastilla que queramos cambiar. Por ejemplo, para cambiar la pastilla de la derecha habríamos de girar hacia la misma dirección. Después, deberíamos utilizar una llave cruz para aflojar los tornillos pero sin terminar de sacarlos.
- Elevar el coche y quitar la rueda. Con un gato tendremos que levantar el coche y retirar los tornillos para extraer la rueda y acceder al sistema de frenos.
- Sacar las pastillas de freno. Cuando veamos la pastilla deberemos utilizar una llave Allen para retirar los tornillos y hacer palanca sobre los bordes del disco para extraer la pastilla.
- Introducir las nuevas pastillas. Estas nuevas pastillas deben entrar a presión y solo necesitaremos insertarlas de lado para que entren y colocarlas sobre la chapa superior metálica. Cuando las mismas estén dentro deberemos comprimir y ajustar el pistón de freno para que queden bien encajadas, finalizando con el atornillado con la llave Allen.
- Montar la rueda. Seguimos con el proceso inverso después de colocar la pastilla. Con la rueda y la llave cruz verificaremos que quede bien sujeta. Además, resulta conveniente que revisemos que no queda ningún tornillo suelto ni flojo, ni en la rueda ni en la pastilla.
- Repetir el proceso con el resto de pastillas de frenos. Habría que hacer lo mismo con el resto de las ruedas. Sin embargo, como en este caso solo vamos a cambiar las de atrás, solo necesitaremos abordar dichas modificaciones en las ruedas traseras.
- Bombear el freno. Resulta preceptivo que presionemos el pedal de forma progresiva varias veces para constatar que los frenos funcionan bien.
- Circular 100 kilómetros sin frenar bruscamente. La otra comprobación se basa en frenar con suavidad durante los primeros 100 kilómetros.
Como vemos, para cambiar los frenos y las pastillas de frenos es necesario seguir estos pasos a fin de garantizar que el procedimiento se ha realizado de forma correcta. Así, nuestra seguridad al volante no quedará mermada.
Os dejamos otro vídeo que os servirá de gran ayuda 😉