Elegir el mejor seguro de coche es una tarea relativamente sencilla, sin importar si se trata de un seguro a todo riesgo o a terceros.

Dado que los seguros de coche para particulares tienen una vigencia de un año, pero se prorrogan automáticamente por otro, la cercanía del final del plazo de vigencia es el momento adecuado para decidir si nos conviene continuar con nuestra compañía de siempre o si es preferible cambiar de aseguradora o de seguro.

Factores clave para elegir el seguro de coche adecuado

¿Cómo elegir seguro de coche sin fallar? Aunque uno de los principales factores para elegir seguro es el precio, no conviene tomar la decisión fiándolo todo al importe de la prima del seguro.

Además, debemos tener en cuenta:

• Las coberturas incluidas en cada propuesta de seguro.
• Los límites indemnizatorios de cada una de las coberturas.
• Las condiciones de exclusión de las prestaciones.
• La reputación de la compañía aseguradora.
• Si deseamos atención presencial, la extensión de su red de oficinas físicas.

Se trata de comparar “peras con peras” y “manzanas con manzanas”: la póliza más cara no tiene por qué ser necesariamente la mejor, y tampoco la más barata ha de ser necesariamente la peor.

Diferencias entre seguro a terceros, a terceros ampliado y a todo riesgo

Muchas aseguradoras ya disponen de pólizas de automóvil 100 % flexibles, que permiten al asegurado decidir qué coberturas incluye en la póliza, además del alcance de las mismas.

Pero existen tres modalidades prediseñadas de seguros que están disponibles en prácticamente todas las compañías. Conozcamos cuáles son esos tipos de seguros de coche:

Seguro a terceros básico

El seguro a terceros más económico solo incluye la cobertura de responsabilidad civil, es decir, la que cubre al causante de un siniestro ante los daños que haya provocado a terceras personas.

Sin embargo, casi todas las compañías aseguradoras de nuestro país también añaden a sus seguros a terceros básicos:

• La cobertura de asistencia en carretera.
• La cobertura de daños personales al conductor del vehículo, en caso de accidente culposo.

Seguro a terceros ampliado

Esta modalidad incluye, como mínimo, las anteriores coberturas y las que siguen:

• Incendio
• Robo
• Rotura de lunas

Seguro a todo riesgo

Se trata del seguro de coche más completo y, por tanto, su precio es notablemente más elevado que el de los anteriores.

A las coberturas del seguro a terceros ampliado se suma la de daños propios. Es decir, quedan cubiertos los daños del vehículo asegurado en los casos de siniestro con culpa y de vandalismo.

Una versión más económica es la del seguro a todo riesgo con franquicia: los daños cubiertos son los mismos, pero a partir de una determinada cantidad (la denominada franquicia). Si el importe de los daños es inferior a la franquicia, no procede derecho a indemnización. Y si el importe de los daños es superior a la franquicia, se deducirá de la indemnización.

Coberturas adicionales a considerar

Además de las coberturas generales anteriormente indicadas, algunas compañías ofrecen, sin apenas impacto en el precio final de la póliza, otras prestaciones extra. A modo de ejemplo:

• Libre elección de taller en caso de reparación.
• Coche de sustitución durante el período de reparación del vehículo.
• Cobertura de siniestros provocados por especies animales cinegéticas.
• Gestión y recursos de sanciones y multas.
• Compensaciones económicas por pérdida total de puntos o retirada del permiso de conducción.

Por eso, antes de tomar ninguna decisión, hay que valorar si en alguna de las distintas propuestas existe alguna cobertura de seguro de coche especialmente interesante para nuestras circunstancias particulares.

Cómo comparar precios y beneficios de los seguros de coche

Realizar manualmente una comparativa de seguros de coche concienzuda puede ocuparnos durante algunas horas. Una buena opción es la de recurrir a los comparadores online de seguros de automóvil.

Se trata de una opción rápida y considerablemente precisa, siempre que utilicemos una plataforma comparadora de seguros que destaque por su fiabilidad y buena reputación.

Revisión anual de la póliza de seguro

Nunca está de más revisar nuestra póliza de seguro de automóvil cuando está a punto de producirse su renovación anual automática. En concreto, la aseguradora está obligada legalmente a comunicarnos el precio de renovación de la póliza con al menos 60 días de antelación a la fecha efectiva de renovación.

Si el precio establecido por la compañía no nos convence y no deseamos renovar la póliza, debemos comunicárselo a la aseguradora. También por imperativo legal, esta comunicación debe hacerse con al menos 30 días de antelación a la fecha de renovación.

Por tanto, disponemos de un mínimo de un mes desde que la compañía nos informa del nuevo precio de nuestro seguro, para realizar comparativas con otras pólizas y escoger la que más nos convenga.

Y ahora que ya conoces las claves para elegir el mejor seguro de coche en 2024, solo queremos recordarte que los complementos indispensables de cualquier seguro de automóvil son la conducción prudente y la previsión de las posibles incidencias en carretera, muy especialmente las meteorológicas.

Si detectamos que la luz de fallo motor se enciende y se apaga, eso no significa que tengamos que acudir a un taller urgentemente, pero es un indicador evidente de que en nuestro vehículo hay algo que no funciona del todo bien.

¿Por qué la luz de fallo motor se enciende y se apaga?

En este sentido, aclaramos que, según la marca y el modelo de vehículo, existen dos modalidades de funcionamiento de la luz anaranjada de fallo del motor:

• En la mayoría de los vehículos, esta se enciende sin parpadear.
• En unos pocos modelos, cuando la luz de fallo motor se enciende en modo parpadeo.

Por lo tanto, cuando nos referimos a que la luz de fallo motor se enciende y se apaga de manera intermitente, nos referimos a que hay ocasiones en las que permanece encendida o parpadeando para, espontáneamente, apagarse minutos u horas después.

Cuando este fenómeno ocurre, es señal de que existe algún problema que se manifiesta solo en ciertas ocasiones. Por lo general, se trata de fallos de poca importancia, pero que requieren ser solucionados.

No olvidemos que con esos pequeños fallos ocurre lo mismo que con los goteos de agua de un grifo o llave de paso: nunca se resuelven solos y siempre terminan yendo a más.

Causas comunes de una luz de fallo motor intermitente

La lista de razones por las que la luz de fallo de motor se enciende es prácticamente interminable: todos y cada uno de los elementos del motor (y de otras partes ajenas al motor) son susceptibles de provocar que esta se encienda, siempre y cuando esos elementos dispongan de algún tipo de actuador o sensor electrónico.

Es decir, aunque parezca contraproducente, esa luz anaranjada también sirve para alertar de que existen averías o fallos en partes que nada tienen que ver con la unidad de propulsión del vehículo.

A modo de ejemplo, estas son algunas de las causas por las que la luz de fallo motor suele encenderse y, pasado un lapso de tiempo variable, apagarse:

Incidencias en el sistema de escape

Las lecturas de valores fuera de rango en las emisiones pueden hacer que la luz se encienda. Y dado que las emisiones pueden normalizarse en ciertos momentos, la luz de fallo motor se apagará.

Problemas en los sistemas de encendido e inyección

Lo mismo puede decirse de estos componentes. Si no están definitivamente tocados, a veces funcionarán correctamente y en otras ocasiones fallarán. La luz de fallo motor se encenderá ocasionalmente.

La tapa del depósito de carburante está deteriorada o mal cerrada

Esto puede causar alteraciones de las presiones en el interior del circuito de suministro de combustible.

Si los sensores de presión detectan esas alteraciones, se encenderá la luz naranja de fallo motor. Con las variaciones de nivel de carburante, habrá ocasiones en que las presiones se normalicen y, entonces, la luz se apagará espontáneamente.

Fallos en cualquier elemento de control electrónico

Aplica lo dicho en líneas anteriores. Por ejemplo, dos elementos tan diferentes como una sonda lambda y un sensor de caudal de líquido refrigerante pueden provocar el encendido de la luz naranja de fallo en el motor.

¿Qué hacer si la luz de fallo motor se enciende de forma intermitente?

Tanto si el encendido de la luz es permanente como si es ocasional, la decisión más prudente es acudir a un taller para que efectúen un diagnóstico electrónico de la anomalía.

¿Y qué hacer si la luz de motor se enciende y se apaga, pero no queremos pasar por el taller antes de la correspondiente revisión periódica de mantenimiento?

En ese caso, es conveniente no exprimir las prestaciones del vehículo mientras la luz está encendida. Y es que, dado que no sabemos exactamente cuál es la falla, lo inteligente es ser precavidos y evitar que el problema pueda provocar una avería de mayor calado.

Además, podemos adquirir un dispositivo OBD de diagnóstico para saber qué avería del motor enciende la luz intermitente. Se trata de un artículo de precio muy bajo que permite conocer cuáles son los componentes que están fallando.

Cómo utilizar un escáner OBD para diagnosticar fallos

El escáner ODB es un dispositivo de diagnóstico de fallo motor muy sencillo de utilizar: ni siquiera es necesario disponer de un ordenador portátil. Algunos disponen de pantalla propia y otros se manejan desde la pantalla de cualquier teléfono móvil.

Todo lo que hay que hacer es:

• Conectar el dispositivo a la toma ODB del vehículo (todos los coches actuales disponen de ese conector, normalmente situado en la parte inferior del habitáculo, a la izquierda del volante).
• Seguir las instrucciones específicas del dispositivo para obtener los códigos de error.

En internet es cuestión de segundos obtener los listados completos de los códigos de error ODB. A modo de ejemplo, el código de error P0118 significa que la temperatura de entrada del líquido refrigerante en el motor es demasiado alta.

Cuándo acudir a un taller para una revisión completa

Si la situación de luz de motor encendida es permanente, es un indicio de que el fallo es de gravedad o de que el componente conflictivo está definitivamente dañado. En esos casos, lo más recomendable es llevar el vehículo a revisión lo antes posible.

Y finalmente, ¿Cómo actuar si la luz de fallo motor se enciende y se apaga, pero observamos señales adicionales de mal funcionamiento, como pérdida de potencia, tirones o ruidos extraños? Como en el caso anterior, la decisión más prudente es acudir al taller cuanto antes.

El clima otoñal y el tráfico se relacionan a través de factores como la lluvia, la niebla y la caída de hojas, que incrementan notablemente el riesgo de accidentes. En este contexto, todo conductor debe aprender a adaptarse para garantizar su seguridad y la del resto de usuarios de la vía.

Principales riesgos de tráfico en otoño

Los cambios meteorológicos influyen directamente en la seguridad vial en otoño a través de ciertas condiciones que requieren de mayor prudencia al volante:

• Asfalto mojado y aquaplaning: la lluvia disminuye la adherencia de los neumáticos y aumenta el riesgo de aquaplaning. Este fenómeno ocurre cuando el vehículo transita por tramos de vía cubiertos de agua, lo que provoca que los neumáticos pierdan tracción. Por otro lado, las lluvias típicas de la temporada provocan que el agua se mezcle con residuos de aceite, suciedad y polvo acumulado en el asfalto, generando una capa resbaladiza especialmente peligrosa en los primeros días de lluvia. En ambos casos, disminuye la seguridad en el tráfico en otoño.
• Hojas en la carretera: las hojas caídas, sobre todo cuando están mojadas, dificultan la conducción segura en otoño porque podrían provocar deslizamientos y ocultar baches o irregularidades en la carretera. 
• Niebla y tráfico: por supuesto, la niebla limita la visibilidad en carretera, lo que exige mayor atención y reduce la percepción de la velocidad y la distancia entre vehículos.
• Primeras heladas: a medida que bajan las temperaturas, cabe la posibilidad de que se formen capas de hielo en algunos tramos de la carretera, como puentes o pasos elevados, lo que aumenta el riesgo de deslizamiento, especialmente durante las primeras horas de la mañana.

Cómo el clima otoñal afecta la conducción

La llegada del frío y las precipitaciones requieren que los conductores adopten unas pautas específicas en su estilo de conducción. Y es que conducir en clima otoñal demanda una mayor atención a los cambios ambientales y una anticipación constante a posibles imprevistos.

Las condiciones de la carretera en otoño varían notablemente: la reducción de luz natural, los cambios bruscos de temperatura y la mayor probabilidad de fenómenos meteorológicos adversos obligan a realizar ajustes en la velocidad, en las maniobras y en la distancia de seguridad.

Conducir durante esta época requiere una sensibilidad especial para adaptarse a estas variaciones y a las condiciones de menor visibilidad, sin dejar de prever cómo pueden reaccionar otros conductores en las mismas circunstancias. Por eso, los conductores deben tener una actitud preventiva, observando con atención el estado de la carretera y respondiendo de manera más suave y gradual en cada movimiento, como frenadas y giros. Así, es más fácil garantizar una conducción segura en otoño, lo que minimiza los riesgos de sufrir cualquier tipo de percance indeseado.

Consejos de seguridad para conducir en clima otoñal

Para aumentar la seguridad, cuando la lluvia y el frío comienzan a hacer acto de presencia, sigue esta serie de recomendaciones:

• Reducir la velocidad: mantener una velocidad moderada incide en una mayor capacidad de reacción en caso de imprevistos.
• Aumentar la distancia de seguridad: esto permite frenar de manera controlada en condiciones de baja adherencia.
• Encender luces adecuadas: las luces de cruce y antiniebla son esenciales para mejorar la visión de los conductores en condiciones de baja visibilidad, y permiten, además, que otros vehículos también nos vean.
• Evitar movimientos bruscos: frenar o girar de manera brusca aumenta las posibilidades de perder el control del vehículo en superficies mojadas o resbaladizas.

Preparación del vehículo para el clima otoñal

Lo primero es que el coche o moto estén en buenas condiciones antes de salir a la carretera, ya que una revisión adecuada disminuye en gran medida los riesgos del tráfico en otoño mientras se circula:

• Revisar el estado de los frenos y neumáticos: los neumáticos deben tener una profundidad de dibujo adecuada para evacuar el agua correctamente y reducir el riesgo de sufrir deslizamientos.
• Comprobar luces y limpiaparabrisas: no cabe duda de que las luces deben estar en perfecto estado, más aún en condiciones de baja visibilidad. También es importante reemplazar los limpiaparabrisas desgastados para garantizar una visibilidad óptima durante las lluvias.
• Verificar la presión de los neumáticos: las bajas temperaturas afectan a la presión de las ruedas, por lo que es aconsejable ajustarla a las recomendaciones del fabricante.
• Utilizar neumáticos de lluvia o invierno: los neumáticos diseñados para condiciones húmedas y frías mejoran la tracción y ayudan a reducir el riesgo de aquaplaning.

La importancia de los neumáticos en otoño

Conducir con neumáticos adecuados aumenta la seguridad en el tráfico en otoño. Estas gomas específicas, diseñadas para mejorar la adherencia en superficies mojadas y frías, ayudan a mantener el control del vehículo en situaciones meteorológicas poco favorables. Además, al mejorar la tracción, contribuyen a minimizar los riesgos de deslizamientos en condiciones de clima lluvioso y tráfico.

Está claro que el clima otoñal y el tráfico requieren precauciones adicionales para garantizar la seguridad en carretera. La lluvia, la niebla o las primeras heladas convierten a esta época del año en un periodo de mayor riesgo, por lo que te recomendamos que sigas pautas como las que te hemos dado, que minimicen los riesgos al volante.

Aunque siempre hay que estar pendiente de su estado, deben extremarse los cuidados para la batería en invierno, puesto que el frío afecta sustancialmente a la velocidad de carga de la misma y, además, rebaja la potencia eléctrica entregada en el momento del arranque del vehículo.

¿Por qué el frío afecta a la batería de tu coche?

La reducción de la velocidad de carga y de la potencia eléctrica de la batería ocurren porque el proceso de recarga de la batería y la posterior generación de electricidad no son más que dos reacciones químicas electrolíticas inversas.

En cualquiera de ambos casos, las bajas temperaturas ralentizan esas dos reacciones químicas: la consecuencia es que cuando hace mucho frío la batería tarda más en cargarse y, además, el voltaje final de carga es menor.

De la misma forma, cuando la batería tiene que entregar de golpe la cantidad de electricidad necesaria para que el motor de arranque comience a girar, la intensidad de la corriente eléctrica producida es inferior a la habitual.

Si, además, el conductor realiza habitualmente trayectos muy cortos en los que el alternador no es capaz de restablecer el nivel de carga que la batería tenía antes del arranque, esta se irá descargando paulatinamente.

La conclusión es que en invierno las baterías tienden a descargarse, a sulfatarse y, por tanto, a quedar inutilizadas de forma definitiva.

Consejos prácticos para mantener tu batería en invierno

Hasta las mejores baterías de coche pueden verse afectadas por las condiciones climáticas, pero estos riesgos pueden minimizarse si se realiza un correcto mantenimiento de la batería en frío. Estos son nuestros consejos de cuidados para la batería del coche en invierno:

1. Comprobación frecuente del nivel de carga de la batería

Esto puede hacerse con un cargador de baterías. Si no lo tenemos, un polímetro también servirá. La comprobación debe hacerse siguiendo estas pautas:

• El encendido ha de estar totalmente desconectado.
• El vehículo tiene que estar a temperatura ambiente. Es decir, no puede estar recién apagado ni haber estado expuesto al sol durante las horas previas.
• Tras haber apagado el motor, hay que esperar al menos una hora. En caso contrario, la lectura del voltaje nos dará una cifra superior a la real.

2. Si es necesario, recarga de la batería

¿Y cuándo recargar la batería? La decisión se toma en función del voltaje obtenido en la comprobación:

• Si el voltaje medido es de 12,7 voltios o superior, el nivel de carga es alto: no hace falta recargar la batería.
• Si el voltaje está entre 12,5 y 12,6 voltios, el nivel de carga es medio-alto. Puede optarse por recargar la batería, pero no es imprescindible.
• Si el voltaje es de entre 12,3 y 12,4 voltios, el nivel de carga es medio-bajo y es muy aconsejable recargar la batería.
• Si el voltaje es igual o inferior a 12,2 voltios, el nivel de carga es muy bajo y es imprescindible recargar la batería.

Añadimos que cuando el voltaje medido es de 12 Voltios o menor, existe el riesgo de que la batería quede definitivamente inutilizada.

Señales de que la batería podría fallar

La batería de un vehículo frío es susceptible de fallar en invierno siempre que el voltaje de la misma sea igual o inferior a los 12,2 voltios.

Cuanto más baja sea la temperatura ambiental, más posibilidades hay de que la batería no entregue la potencia necesaria para que el coche arranque. Y las señales físicas de advertencia de que hay poca carga son las que siguen:

• El ruido del motor de arranque indica que este gira más lentamente de lo habitual.
• El coche no arranca a la primera.
• Las luces exteriores del vehículo bajan de intensidad cuando se conecta otro dispositivo eléctrico (por ejemplo, el ventilador interior).

¿Cómo cargar correctamente la batería en invierno?

Para prolongar la vida útil de la batería es necesario cargarla siempre que su voltaje sea igual o inferior a los 12,4 voltios. Toma nota del procedimiento correcto para cargar la batería del coche en invierno:

• Al menos, ha de estar desconectado el borne negativo de la batería. Si se desconecta también el positivo, mejor aún.
• Los cargadores de hoy en día dejan de cargar automáticamente cuando se alcanza el voltaje de plena carga. Por tanto, no conviene interrumpir antes el proceso de recarga.

Además, cuando las baterías están muy descargadas (por debajo de 12,2 Voltios), es seguro que están parcialmente sulfatadas. Para estos casos, la mayoría de los cargadores inteligentes disponen de una modalidad de carga por pulsos o carga de reparación. La carga por pulsos disuelve los cristales de sulfato, pero es significativamente más lenta que la convencional.

Herramientas y productos útiles para el cuidado de la batería

Además de un cargador de baterías, es recomendable disponer también de un producto limpiador de bornes. El motivo es que si la carga de la batería es muy baja, la sulfatación interior se extiende al borne negativo de la batería y puede crear una barrera que dificulta el paso del flujo eléctrico.

En resumidas cuentas, los problemas de batería en invierno pueden evitarse con un control semanal de la batería y una recarga preventiva cuando el voltaje se sitúe por debajo de los 12,4 V. Además, los cuidados para la batería en invierno también incluyen la limpieza periódica de los bornes negativos sulfatados.

¿No sabes si el seguro te cambia la rueda tras sufrir un reventón o un pinchazo? ¿Tu seguro de coche cubre el cambio de rueda, pero no conoces exactamente el alcance de la prestación? ¿No dispones de servicio de cambio de rueda en tu seguro obligatorio y quieres saber de qué alternativas dispones?

En cualquier caso, te interesa conocer la respuesta a todas estas cuestiones y a otras relacionadas con el seguro y con el cambio de neumáticos en carretera.

¿En qué consiste el servicio de cambio de rueda del seguro?

El servicio de cambio de rueda del seguro es una prestación mediante la que el asegurado tiene derecho a que la compañía le envíe un operario que sustituya la rueda dañada (el conjunto de llanta y neumático) por la rueda de repuesto del vehículo.

Beneficios de contar con un seguro que cubre el cambio de ruedas

La ventaja más evidente es la seguridad de que, en caso de reventón, pinchazo o rotura de la válvula de inflado del neumático, tendremos las espaldas bien cubiertas. Pero, además, este servicio ofrece otros beneficios:

El seguro cambia una rueda incluso si el coche está en el domicilio del tomador del seguro

En la mayoría de los seguros este servicio se presta desde el kilómetro cero, lo que incluye el cambio de rueda por el seguro de un vehículo que está estacionado en el propio garaje del asegurado.

El servicio de cambio de rueda por el seguro no tiene límite anual de intervenciones

Las aseguradoras cubren, sin penalización económica, hasta tres servicios de asistencia en carretera anuales. Eso sí, cuando son más de tres las asistencias anuales, entonces la póliza subirá de precio al año siguiente.

Es una cobertura cuyo impacto en el importe de la prima es muy pequeño

Contra la creencia popular, la cobertura de asistencia en carretera supone un incremento muy poco significativo del precio del seguro de coche.

Obviamente, el impacto en las primas de los vehículos más antiguos es superior que cuando se trata de coches nuevos o seminuevos.

¿Qué cubre realmente el seguro al cambiar una rueda?

La cobertura básica de asistencia en carretera solo incluye el cambio de la rueda dañada por la de repuesto.

Ahora bien, en algunas compañías también es posible incluir en esta cobertura la reparación del pinchazo, siempre que este sea reparable.

Lo que nunca está incluido en la cobertura de asistencia en carretera es la sustitución del neumático deteriorado.

A este respecto, la aseguradora solo cubre el coste total de sustitución de un neumático irreparable en el caso de que el vehículo esté asegurado a todo riesgo y sin franquicia. Pero si el seguro a todo riesgo tiene franquicia, el asegurado solo cobrará la diferencia entre el coste de sustitución del neumático y la franquicia. Y si ese coste es inferior a la franquicia, entonces el tomador del seguro no cobrará nada.

Consejos para activar la asistencia del seguro en carretera

La activación del seguro de cambio de rueda en carretera no ofrece ninguna dificultad:

• Lo primero es echar mano de la póliza del seguro para facilitar su número y los datos del asegurado a la aseguradora.
• A continuación, se comunica la incidencia a la compañía de seguros, bien telefónicamente o mediante app móvil, indicando que es preciso sustituir una rueda del vehículo por la de repuesto.

Una vez hecho eso, solo resta esperar la llegada del vehículo de asistencia. Lo más habitual es que la asistencia tarde entre 30 y 60 minutos en presentarse, dependiendo de nuestra ubicación y del tipo de vía.

Pautas de seguridad recomendadas

Tengamos incluido el cambio de rueda en el seguro o no, las pautas de seguridad a seguir en caso de válvula de inflado rota, pinchazo o reventón son las mismas:

• Dejar de conducir: si se rueda con el neumático deshinchado, este puede quedar inutilizado de forma definitiva. En caso de reventón, podemos deteriorar también la llanta. Además, conducir con un neumático desinflado incrementa la probabilidad de sufrir y provocar un accidente.
• Detener el vehículo en un lugar apartado y seguro: si eso no es posible, hay que señalizar su posición con los triángulos de emergencia o la señal V-30. Además, debemos salir del vehículo y situarnos en una ubicación segura, lejos de la calzada y del arcén.

Alternativas si tu seguro no cubre el cambio de ruedas

Una alternativa es contratar, de forma independiente, un servicio de asistencia integral al automovilista. En España son varias las entidades que comercializan este tipo de servicios, con las siguientes ventajas e inconvenientes:

• Además del cambio de ruedas, el conductor dispone de un amplio abanico de prestaciones adicionales. Una de ellas es el servicio de taller móvil.
• En los mantenimientos y en la reparación de pequeñas averías, el conductor solo paga el coste de los materiales y de las piezas de repuesto empleadas en esas operaciones.
• El coste de estos servicios de ayuda y asistencia integral al automovilista es considerablemente más elevado que el de la cobertura de asistencia en carretera de las compañías aseguradoras.

Por lo demás, si en nuestro seguro de coche no disponemos de la cobertura de asistencia en carretera ni tampoco hemos contratado el servicio integral con una firma especializada, podemos pensar que la única salida que nos queda es cambiar la rueda nosotros mismos.

Bajo nuestro punto de vista, debe evitarse a toda costa esa alternativa, salvo que el vehículo esté en un aparcamiento o detenido en una propiedad privada en la que no haya ningún tipo de tráfico.

En este sentido, la DGT alerta en su portal web de que el cambio de rueda en vías públicas es una situación en la que el riesgo de atropello es alto. Por eso, es preferible asumir el coste de la grúa o de un taller móvil.

Si tienes contratada la cobertura de asistencia en carretera, el seguro te cambia la rueda deteriorada por la de repuesto. Lo que no te cubre, salvo que se trate de un seguro a todo riesgo, es la sustitución del neumático dañado por uno nuevo.

Quizá hace ya tiempo que pilotas una máquina de dos ruedas y te gustaría conocer algunas técnicas de frenado en moto específicas para situaciones de emergencia. O también puede ser que acabes de estrenarte como motociclista y aún no sepas bien cómo se frena en una moto sin riesgo de deslizamiento o caída.

En cualquiera de ambos casos, te interesan nuestros consejos generales de frenado en moto.

Consejos para frenar en moto con seguridad y sin riesgos

Evidentemente, lo primero que debes hacer es cerciorarte de que el sistema de frenado y los neumáticos están en perfecto estado de conservación y funcionamiento.

Si no tienes conocimientos técnicos, deja que sea un mecánico especializado quien revise el estado de frenos y neumáticos de tu moto. Una vez hecho eso, ten en cuenta estos tips:

Conoce la sensibilidad y la capacidad de respuesta de ambos frenos

Antes de comenzar a circular en tu moto por zonas concurridas, familiarízate en un lugar seguro con la capacidad de respuesta y la sensibilidad de los frenos. Así evitarás sorpresas por exceso o por defecto de frenada.

Usa siempre los dos frenos

La regla básica del frenado seguro en moto es usar ambos frenos. Ten en cuenta que es el freno delantero el que suministra la mayor parte de la potencia de frenado. Y ten en cuenta también que el freno trasero es el que proporciona estabilidad a la frenada.

Por tanto, es necesario que aprendas a dosificar correctamente la intensidad con la que empleas los frenos delanteros y traseros de la moto.

Haz frenadas anticipadas y progresivas

Esto vale para cualquier vehículo de dos ruedas, incluidos ciclomotores y bicicletas, pero es especialmente importante para evitar los riesgos característicos del frenado en motos de 125 centímetros cúbicos y cilindradas superiores.

Estas motos generan unas fuerzas de inercia muy superiores a las de las máquinas de dos ruedas más ligeras. Por tanto, un bloqueo de las ruedas puede derivar en un derrape o en un caballito invertido.

En cualquiera de ambos casos, la pérdida de control de la máquina es poco menos que inevitable.

Nunca frenes en curva, a menos que sea imprescindible

Frenar una moto en curva siempre implica cierto riesgo de desestabilización, salvo que la frenada sea sumamente suave y progresiva. Esto es especialmente peligroso cuando la calzada está mojada.

Emplea unos neumáticos adecuados

Permite que un especialista te asesore sobre qué neumáticos de moto son los más adecuados para tu máquina y para tu forma de pilotar.

Ensaya técnicas de frenado de emergencia

Busca una escuela de pilotaje donde te enseñen —en zona cerrada y con todas las medidas de seguridad en el frenado en moto— a efectuar frenadas de emergencia.

Algunas técnicas de frenado de emergencia

Y ya que hemos mencionado las frenadas de emergencia, vamos a describir, para aquellos pilotos que ya tienen cierta experiencia, tres técnicas de frenado extremo que pueden ser muy útiles en situaciones apuradas.

Frenado combinado: manteniendo la estabilidad

En una situación de emergencia, lo más importante es que la moto no se desequilibre o pierda estabilidad. Para conseguirlo, se comienza a frenar empleando con intensidad el freno trasero.

A continuación, y muy rápidamente, se aplica presión al freno delantero, incrementándola gradualmente.

Nunca debe aplicarse la máxima presión al freno delantero inicialmente, para evitar dos riesgos:

• Que se produzca un caballito invertido.
• Que la rueda delantera se coloque en ángulo respecto de la dirección de desplazamiento, lo que es sinónimo de caída segura.

El truco del contramanillar: eficaz en situaciones de frenado de emergencia en curva

¿Qué hacer si estamos trazando una curva y nos encontramos con un animal, un vehículo detenido o cualquier otro tipo de obstáculo imprevisto? En esas situaciones, puede emplearse la técnica del contramanillar.

Se trata de girar muy ligeramente el manillar en la dirección opuesta a la de la curva. Esto ayuda a frenar de manera intensa sin perder la estabilidad.

Añadimos que se trata de una maniobra de frenada que, antes de emplearse en una situación real, debe practicarse a conciencia en zonas y situaciones seguras.

Técnica del panic stop: solo para zonas rectas

Antes de probar esta técnica en situaciones reales, debe practicarse a fondo.

Se trata de un método que se utiliza cuando se circula a gran velocidad por zonas rectas y es necesario que la frenada sea lo más intensa posible.

Para ello, se accionan ambos frenos a la vez y con fuerza, sujetando firmemente el manillar. El objetivo es que el manillar no cabecee durante la frenada, comprometiendo la estabilidad de la motocicleta.

Errores frecuentes al frenar en una moto

Estos son los errores comunes al frenar en moto y que suelen derivar en caída o colisión, especialmente cuando el piloto es principiante:

• Usar exclusivamente los frenos delanteros o traseros.
• Frenar de manera muy brusca, sin haber practicado suficientemente la maniobra.
• Frenar en curvas.
• Mantener el cuerpo en posición vertical durante el frenado.
• No sujetar con firmeza el manillar.

Además, entra dentro de lo posible que un piloto sin experiencia cometa simultáneamente esos cinco errores. En tal supuesto, la probabilidad de salir indemne de la frenada es prácticamente nula, por lo que, repetimos, practica todo lo que puedas.

Y ahora que ya conoces cómo se frena en una moto sin correr riesgos y algunas de las técnicas que permiten detener una máquina de dos ruedas en situaciones de urgencia, te recordamos que la mejor forma de evitar accidentes y caídas es pilotar con la máxima prudencia, especialmente cuando el piso está mojado.

La temporada de lluvias puede ser una pesadilla para quienes utilizan la moto como medio de transporte, ya que las condiciones de humedad, la baja visibilidad y las superficies resbaladizas incrementan el riesgo de accidentes. Sin embargo, con los accesorios para moto en días de lluvia adecuados, es posible conducir una moto con mayor seguridad y comodidad. ¿Quieres saber cuáles son los imprescindibles?

Chaquetas impermeables para moto

Esta prenda está diseñada para proteger al conductor de la lluvia a la vez que permite una correcta transpiración.

Las chaquetas impermeables suelen estar fabricadas con materiales como el nailon o poliéster, cuentan con tratamientos especiales para repeler el agua y tienen costuras selladas que evitan la entrada de humedad. También incluyen ajustes en el cuello, muñecas y cintura para bloquear el viento y el agua.

Al elegir una chaqueta, recomendamos optar por modelos que ofrezcan visibilidad ante otros conductores mediante elementos reflectantes.

Guantes impermeables de moto

Los guantes impermeables mantienen las manos secas y protegidas, lo que permite un buen agarre en el manillar incluso bajo la lluvia.

Fabricados con materiales como el Gore-Tex o el neopreno, estos guantes evitan la acumulación de agua en las manos y reducen la pérdida de calor, algo fundamental en días fríos y húmedos.

Algunos modelos también ofrecen protecciones en los nudillos y las palmas para mejorar la seguridad en caso de caídas, así como detalles antideslizantes que facilitan el control de la moto.

Neumáticos de moto para lluvia

La adherencia en carreteras mojadas es esencial para una conducción segura, y los neumáticos de moto para lluvia están especialmente diseñados para aumentarla y optimizarla.

Estos neumáticos de moto tienen un dibujo específico para evacuar el agua y mantener el contacto con el asfalto, lo que reduce el riesgo de deslizamientos. Por tanto, la elección de unos buenos neumáticos adaptados a la lluvia garantiza un mejor agarre y proporciona una mayor estabilidad al frenar y al tomar curvas en superficies mojadas.

Cubrebotas y protectores de calzado

El frío y la humedad pueden afectar tanto la comodidad como la salud del conductor. Los cubrebotas impermeables se colocan sobre el calzado y están hechos de materiales resistentes al agua, con la idea de proteger eficazmente los pies de la humedad.

Muchos de estos accesorios incluyen suelas antideslizantes, que aportan mayor estabilidad al momento de detenerse o apoyar el pie en superficies mojadas. Son una opción especialmente útil para quienes deben conducir largos tramos bajo la lluvia.

Visibilidad y protección contra el agua en carretera

Entre los accesorios recomendables para mejorar la visibilidad en moto en días de lluvia se incluyen los protectores de visera y los productos antiempañantes.

Los protectores de visera permiten mantener el campo de visión libre de gotas de agua, mientras que los tratamientos antiempañantes en el interior del casco evitan la condensación. Ambos son fáciles de usar y proporcionan una mejora considerable en la visibilidad.

Otros accesorios útiles para la moto en lluvia

Además de los accesorios básicos, existen otros complementos que pueden hacer la conducción en lluvia más segura y cómoda:

• Fundas de asiento antideslizantes: este tipo de fundas se adapta a los asientos de la moto y evita que el conductor se deslice, lo que resulta particularmente útil en días de lluvia cuando el asiento puede mojarse.
• Capas protectoras para mochilas: si se transportan objetos en una mochila o maleta, las capas ayudan a proteger el contenido de la humedad.
• Parabrisas alto: aunque no es exclusivo para la lluvia, un parabrisas ayuda a reducir el impacto directo de las gotas de agua en el conductor, lo que mejora la visibilidad y proporciona mayor comodidad durante la conducción en condiciones meteorológicas adversas.

Consejos de mantenimiento posteriores a la lluvia

Después de un día de lluvia, te recomendamos que hagas algunas tareas de mantenimiento para evitar el desgaste prematuro de la moto:

• Secado y limpieza: una vez terminado el trayecto, seca la moto con un paño suave para evitar la corrosión de las piezas. En particular, las zonas metálicas deben revisarse para asegurarse de que no acumulen humedad.
• Revisión de piezas: examina los frenos y la cadena para detectar cualquier signo de óxido o desgaste, aplicando lubricante en las partes que lo requieran.
• Limpieza de visera y casco: limpia la visera y el casco para evitar que el barro o las gotas de agua acumuladas afecten su visibilidad.

Lista de verificación previa a un viaje con lluvia

Por último, antes de recorrer un trayecto en días de lluvia, puede serte útil esta breve lista de verificación para garantizar una conducción segura:

1. Revisa los neumáticos: asegúrate de que estén en buen estado y con la presión correcta.
2. Prepara el equipo impermeable: comprueba que la chaqueta, guantes y pantalones impermeables están en buenas condiciones.
3. Asegura la visibilidad: aplica productos antiempañantes en la visera y verificar que las luces de la moto funcionen correctamente.
4. Ajusta bien todos los accesorios: todos los accesorios, como los cubrebotas y las fundas, deben estar bien colocados para hacer su función correctamente.

Los accesorios para moto en días de lluvia garantizan una conducción segura y cómoda. Desde las chaquetas y guantes impermeables hasta los neumáticos y accesorios de visibilidad, todos estos elementos ofrecen protección y aumentan la seguridad al hacer trayectos en condiciones climáticas adversas. Ya sabes que lo importante es llegar al destino y disfrutar del viaje.

En Muchoneumatico.com, nuestro compromiso siempre ha sido brindar un servicio de calidad, rápido y eficiente para todos nuestros clientes. Sin embargo, la reciente DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) ha causado fuertes lluvias y afectado gravemente la logística en la Comunidad Valenciana, donde están ubicados nuestros almacenes principales. Queremos informar a nuestros clientes sobre el impacto de esta situación en la tramitación y entrega de los pedidos realizados entre el 29 de octubre y el 3 de noviembre.

Afectación en los envíos debido a la DANA

Las lluvias intensas han provocado interrupciones en nuestras operaciones habituales y están dificultando la circulación de las empresas de transporte con las que colaboramos. Como resultado, los pedidos realizados en los días mencionados se tramitarán a partir del lunes 4 de noviembre y serán entregados entre los días 5 y 7 de noviembre, siempre que las condiciones climáticas lo permitan y no haya más incidencias.

Agradecemos profundamente la paciencia y comprensión de nuestros clientes en este momento, ya que estas condiciones están fuera de nuestro control. Sin embargo, estamos haciendo todo lo posible para minimizar los retrasos y coordinar con nuestros socios logísticos para reanudar el servicio lo antes posible.

¿Qué hacer si tiene alguna duda o necesita ayuda?

Entendemos que esta situación puede generar inconvenientes y preguntas sobre el estado de su pedido. Debido a la alta demanda de consultas, nuestras líneas telefónicas están experimentando una saturación significativa. Para asegurarle una respuesta rápida y precisa, le recomendamos que nos envíe un correo electrónico a [email protected] con su número de pedido y cualquier consulta específica que tenga sobre la entrega. Nuestro equipo de atención al cliente está trabajando activamente para responder todas las solicitudes y le brindará la información necesaria sobre su pedido a la mayor brevedad posible.

Agradecimiento por su comprensión

Desde Muchoneumatico.com, queremos agradecer nuevamente su paciencia y confianza. Lamentamos profundamente los inconvenientes y reiteramos nuestro compromiso de ofrecerle un servicio de calidad en todo momento. Seguimos atentos a las mejoras en las condiciones meteorológicas para reanudar nuestras operaciones con la máxima normalidad y eficacia.