Presión de los neumáticos en invierno: recuerda revisarla con frecuencia

Para conducir con mayor seguridad, ahorrar en combustible y aumentar la eficacia es necesario controlar la presión de los neumáticos. Recuerda que la revisión de los neumáticos de forma periódica lleva consigo multitud de ventajas, entre las cuales se pueden destacar:

• Más precisión en la dirección.
• Reducción de la posibilidad de reventar.
• Mayor agarre.
• Reducción del esfuerzo del motor y del consumo.
• Rápida corrección ante un imprevisto.

La importancia de la presión de los neumáticos

¿Por qué es crucial mantener la presión adecuada?

La presión de una llanta es importante porque las ruedas son el único contacto que existe entre el asfalto y el vehículo, por eso deben estar siempre en perfecto estado. Para comprobar el estado no solo hay que prestar atención a si los neumáticos están desgastados o dañados, también hay que comprobar si tienen la presión adecuada. La presión correcta garantiza un rendimiento óptimo y una conducción segura.

¿Cuándo hay que comprobarla?

Es recomendable hacerlo al menos una vez al mes, pues está en juego tu seguridad y la del resto de personas. Recuerda que, si no circulas con la presión adecuada, además de dañar o deformar el neumático, consumirás más carburante e influirá en tu conducción. Además, revisarla antes de realizar viajes largos es fundamental para evitar problemas en carretera.

¿Cuál es la presión adecuada?

Cada fabricante indica una presión específica para su vehículo. Puedes encontrar esta información en los documentos del coche, en la tapa del depósito del combustible o en el interior de la puerta del coche. Es vital seguir estas indicaciones para asegurar un desempeño correcto de los neumáticos.

Cuando la presión es muy baja, aumenta la distancia de frenado y, en caso de lluvia, también aumentará la probabilidad de aquaplaning. El neumático se calentará más, se deformará y el coche consumirá más combustible debido a la baja presión sobre la resistencia a la rodadura. Si circulas con más presión de la debida, perderás agarre y la parte central de la goma sufrirá un desgaste irregular. Solo es necesario más presión para circular con una carga más elevada de lo habitual.

Presión de los neumáticos en invierno

Cambios bruscos de temperatura y su impacto

Con los cambios bruscos de temperatura, los neumáticos pierden presión, por lo que es recomendable revisar el valor con asiduidad. No se recomienda superar en 0,2 bares la presión indicada por el fabricante. Cuando bajan las temperaturas es importantísimo prestar atención a la presión de tus neumáticos porque puede llegar a bajar hasta 0,5 bares cada 10 grados de variación de temperatura.

El neumático con baja presión tiene un mayor desgaste en el borde exterior, lo que se traduce en una menor eficiencia del combustible por el aumento de la resistencia a la rodadura. También se perderá adherencia, lo que puede ser especialmente peligroso en carreteras heladas o mojadas.

Frecuencia de revisión en invierno

Para que lleves tus neumáticos con una presión adecuada, debes revisarla como mínimo una vez al mes, y hacerlo siempre en frío. Se considera que un neumático está frío cuando ha reposado un par de horas tras circular al menos 5 kilómetros a una velocidad máxima de 50 kilómetros por hora. Revisar la presión en frío garantiza una lectura precisa y evita errores que pueden ocurrir cuando los neumáticos están calientes.

Vehículos con y sin TPMS

En los vehículos anteriores a noviembre de 2014 hay que buscar la presión del neumático en los lugares que te hemos indicado anteriormente. Los vehículos fabricados después de esa fecha cuentan con un sensor de presión de neumáticos o TPMS (Tire Pressure Monitoring System) que forma parte del equipamiento obligatorio.

Este sistema facilita mucho la tarea de mantener la presión correcta, ya que te alerta automáticamente cuando la presión está por debajo del nivel recomendado.

Consejos adicionales para el invierno

Utiliza neumáticos de invierno

Además de mantener la presión adecuada, considera la posibilidad de cambiar a neumáticos de invierno si vives en una zona donde las temperaturas bajan significativamente o si hay nieve y hielo. Estos neumáticos están diseñados para ofrecer un mejor agarre y rendimiento en condiciones frías.

Mantén el coche bien equipado

Lleva siempre en el coche un manómetro para medir la presión y un compresor portátil. Estos dispositivos pueden ser de gran ayuda si necesitas ajustar la presión de los neumáticos mientras estás en la carretera.

Conduce con precaución

Recuerda que en invierno, las condiciones de la carretera pueden cambiar rápidamente. Adapta tu velocidad a las condiciones del clima y la carretera, y mantén una distancia segura con otros vehículos.

Mantén tus neumáticos en óptimas condiciones este invierno

En definitiva, comprobar la presión de neumáticos en invierno es primordial debido a que con cada bajada de temperatura la presión de las ruedas caerá significativamente. A pesar de que puedas vivir en una población donde no se acucien estas variaciones de temperatura, no olvides hacer una revisión de neumáticos al menos una vez al mes para garantizar tu seguridad y la de los demás.

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