Cómo encontrar tu coche en un parking lleno de gente sin usar el móvil

Cuando vas a grandes centros comerciales o, en todo caso, a zonas con grandes aparcamientos, encontrar tu coche suele ser un drama: pero aquí tienes la solución para todos. Cualquiera que se haya perdido en un estacionamiento grande al menos una vez. O, al menos, se desorientó para poder encontrar (al menos no de inmediato) su automóvil dentro.

Es uno de los momentos en los que más entramos en pánico: el miedo a no encontrar el coche, el miedo a que se lo hayan robado, las preocupaciones por cómo llegar a casa. Encontrarlo puede ser fácil, en realidad.

En general nos inclinamos a pensar que, a falta de indicaciones precisas o buena memoria, siempre podríamos referirnos al uso del teléfono móvil para rastrear la posición del coche. Ya sea a través de una foto que nos muestre el área, o mediante la detección de GPS, podemos encontrar fácilmente el automóvil sin entrar en un ataque de pánico: sin embargo, también existe una solución más ‘humana’.

Encuentra el coche en el parking: incluso sin móvil

La tecnología no siempre es tan necesaria e indispensable: o mejor dicho, podemos explotarla pero también en conjunto con nuestra «presencia física»: o para ser más precisos, con nuestra cabeza.

¿En qué sentido? Cuál sería el apoyo de la ‘cabeza’ en este caso: en eso consiste el truco o, mejor dicho, la técnica que nos permite, dentro de un parking, encontrar el coche. Una estrategia eficaz, ya la vez sencilla y natural. Imagínese en un gran estacionamiento lleno de coches y sin una orientación que le permita encontrar su posición inicial nuevamente.

¿Qué hacer? El sistema de localización inmediata del coche en el parking es menos ‘tecnológico’ de lo que uno podría imaginar. Y consiste en explotar las teclas, el ‘sonido’ de las teclas y nuestra cabeza.

La solución para encontrar el coche en el parking

¿Cómo? En esencia, nuestra cabeza funciona como una antena que nos permite desbloquear las llaves del coche y localizar nuestro coche. ¿No lo crees?

Fácil de hacer, incluso si es extraño a primera vista: sostenga las llaves del automóvil cerca de su cabeza y escuche el clásico sonido de clic acústico, la señal de desbloqueo de la puerta. Según algunos expertos, de hecho, los controles remotos de los automóviles envían señales de radio de muy corto alcance, que viajan de cinco a veinte metros, de lo contrario, si están lejos, se pierden en el camino.

En cambio, el cuerpo de uno puede convertirse en una especie de antena que lo amplifica: es decir, aumenta el rango de acción del emisor de señales. Todo debido a las ondas electromagnéticas del mando a distancia que explotan las moléculas de agua presentes en nuestro organismo.

De esta forma el clic de apertura del coche se amplía, hasta que encontramos la señal y nos deja encontrar el coche en el parking.