Cómo combatir el calor en el día más cálido de julio

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), ha avisado de que este lunes 25 será el día más cálido de julio, con temperaturas máximas que podrían llegar e incluso superar los 44 grados. Hay que tener mucho cuidado y seguir unos consejos útiles para poder combatir esta peligrosa ola de calor que, hasta la fecha, habría provocado más de 500 fallecimientos en el solo territorio español.

En condiciones de calor extremo, los sectores de la población más afectados son especialmente los que viven en las grandes ciudades, en zonas con poco refugio a la sombra, en viviendas sobrecalentadas y mal ventiladas.

Las personas mayores corren un mayor riesgo, especialmente si están solas y enfermas, ya que pueden desarrollar rápidamente una deshidratación, sufrir un agravamiento de enfermedades crónicas (como las cardiorrespiratorias) o ser víctimas de un golpe de calor.

En general, sin embargo, una serie de simples hábitos de comportamiento y medidas preventivas pueden ayudar a reducir significativamente las consecuencias nocivas de las olas de calor.

10 consejos contra el día más cálido de julio

Son 10 sencillas reglas de comportamiento que pueden limitar la exposición a altas temperaturas, facilitar el enfriamiento corporal y evitar la deshidratación, reducir los riesgos en las personas más frágiles (personas muy mayores, personas con problemas de salud, que toman drogas, lactantes y niños muy pequeños).

Este es el decálogo que te ayudará a combatir el calor en el día más cálido de julio:

SALIR DE CASA EN LAS HORAS MENOS CALIENTES DEL DÍA

Evita salir al aire libre durante las horas de más calor, es decir, de 11.00 a 18.00 horas. Si sales en las horas de más calor, no olvides proteger tu cabeza con un sombrero de color claro y tus ojos con gafas de sol de calidad. Protege también la piel de las quemaduras solares con cremas solares de alto factor protector.

UTILICE ROPA APROPIADA Y LIGERA

Tanto en casa como al aire libre, usa ropa ligera y no ajustada, preferiblemente de fibras naturales para absorber mejor el sudor y permitir que la piel respire

REFRESCA EL AMBIENTE DEL HOGAR Y DEL TRABAJO

Proteje las ventanas expuestas al sol con persianas, cortinas, etc. Cierra las ventanas durante el día y ábralas durante las horas más frescas de la mañana y de la noche. Si utilizas aire acondicionado, recuerda que debe utilizar esta eficaz herramienta tomando algunas precauciones para evitar consecuencias para la salud y un consumo excesivo de energía.

En particular, se recomienda usarlos preferentemente en días con condiciones climáticas de riesgo; para regular la temperatura entre 24°C – 26°C. Recuerda cubrirte al pasar de un ambiente cálido a uno más frío. Hay que dar importancia a su mantenimiento y limpiar con regularidad los filtros y evitar el uso simultáneo de electrodomésticos que producen calor y consuman demasiada energía.

REDUCE LA TEMPERATURA CORPORAL

Tomar baños y duchas con agua tibia, humedecer cara y brazos con agua fresca. En caso de temperaturas muy altas, puede ayudar el colocar un paño húmedo en la nuca.

REDUCIR EL NIVEL DE ACTIVIDAD FÍSICA

En las horas más calurosas del día, evita realizar actividad física intensa o trabajos pesados ​​al aire libre.

BEBE REGULARMENTE Y COME CORRECTAMENTE

Beber al menos 2 litros de agua al día (salvo indicación en contrario del médico tratante). Los ancianos deben beber aunque no sientan la necesidad. Evita beber alcohol y limite la ingesta de bebidas carbonatadas o demasiado frías. Preferiblemente comer alimentos ligeros con un alto contenido de agua (frutas y verduras). Presta especial atención al almacenamiento de alimentos y evite dejarlos al aire libre por más de 2 horas.

TOMA ALGUNAS PRECAUCIONES SI SALE EN COCHE

Si te subes a un coche aparcado al sol, abre las puertas antes de subirte, luego inicia el viaje con las ventanillas bajadas o utiliza el sistema de aire acondicionado. Ten cuidado al colocar a los niños en los asientos de seguridad, asegurándose de que no se sobrecalienten. Al estacionar el automóvil, nunca deje menores o animales en el habitáculo, ni siquiera por unos minutos.

CONSERVE LOS MEDICAMENTOS CORRECTAMENTE

Lee atentamente los métodos de almacenamiento indicados en el empaque de los medicamentos y mantén todos los fármacos en sus empaques, lejos de fuentes de calor y luz solar directa. Almacene los medicamentos en el refrigerador para los cuales se requiere una temperatura de almacenamiento que no exceda los 25-30 °C.

TOMAR PRECAUCIONES ESPECIALES EN CASO DE PERSONAS DE RIESGO

Cuando llega el calor, las personas mayores, con enfermedades crónicas (cardiovasculares, respiratorias, neurológicas, diabetes, etc.) y las personas que toman drogas, deben observar las siguientes precauciones:

• consultar al médico para un posible ajuste de la terapia o la frecuencia de los controles clínicos y de laboratorio (por ejemplo, para los diabéticos es recomendable aumentar la frecuencia de los controles de glucemia);
• informar al médico cualquier molestia, incluso leve, que se presente durante la terapia con medicamentos;
• nunca suspenda la terapia en curso por su propia iniciativa.

VIGILANCIA Y ATENCIÓN A PERSONAS EN RIESGO

En periodos prolongados de calor intenso, presta atención a los familiares o vecinos mayores, especialmente si viven solos y, en lo posible, ayudarlos en algunas pequeñas tareas, como hacer la compra, recoger medicamentos en la farmacia, etc. Informa a los servicios sociosanitarios de aquellas situaciones que requieran intervención, como personas que vivan en situación de grave pobreza o peligro para la salud (p.ej. personas sin hogar en condiciones de grave necesidad).

Todo apunta a que, de aquí en adelante, nuestros veranos estarán siempre llenos de días marcados por un calor extremo. Sigue estos consejos que parecen simples (o incluso banales), pero que pueden ser útiles para evitar posibles imprevistos desagradables.