Reciclaje de neumáticos: de qué va

El reciclaje de neumáticos es un asunto que cada día está más inscrito en la mentalidad colectiva de nuestra sociedad. Cada año miles y miles de neumáticos se acumulan en vertederos. En España son más de 250000 toneladas las que se desechan anualmente.

Aunque la ley española impone el reciclaje de todos los neumáticos lo cierto es que todavía no hay una capacidad real de reciclar tales cantidades y son necesarios proyectos que apoyen la economía circular en este sentido.

Cómo se lleva a cabo el reciclaje

Existen varias maneras de reciclar los neumáticos y diferentes objetivos. Para cada fin dispones de diferentes procesos.

La segunda vida de los neumáticos

Una buena parte de los neumáticos lo destinamos a su reutilización. Sin embargo son todavía muy pocas las empresas autorizadas. En España solo dos entidades pueden realizar este proceso, Signus y TNU.

El proceso comienza con la clasificación según unos parámetros estrictos que determinan la aptitud del neumático usado para pasar a un proceso denominado de recauchutado. Mediante este proceso hemos de hacerle regresar al mercado con una calidad y vida útil garantizada y equivalente a la de un neumático nuevo.

Este proceso es costoso y solo merece la pena darle esta segunda vida de los neumáticos a aquellos que son más caros, como pueden ser los de camiones y maquinaria agrícola o industrial. Por otro lado, realmente solo dos empresas autorizadas parece muy poco para el gran volumen que se maneja.

La conversión en otros productos. Economía circular

El resto de los neumáticos deberían ser descompuestos y reconvertidos en otra serie de materias primas para su reutilización. Esto lo podemos hacer mediante procesos de aplicación de calor como la termólisis o la pirólisis. También podemos recurrir a la incineración y utilizar la producción de calor para la generación de energía eléctrica. Sin embargo este es un proceso altamente contaminante y que se debe evitar.

Otra forma de reciclaje de los neumáticos es la trituración y la puedes llevar a cabo por medios mecánicos principalmente. Consiste en pasar los neumáticos, previamente clasificados por tipologías y tamaños, a través de una cadena de triturado. Normalmente este proceso lo realizas por fases que van desde el tronzado o corte en piezas grandes hasta el granulado milimétrico de la goma en diferentes tamaños, pasando por la separación del textil interior y el alambre.

En esta transformación surgen, en cada fase, productos con diferentes aplicaciones posibles por lo que no toda la materia utilizada en origen llega al final de la cadena. No todas estas plantas tienen por qué contemplar todo el proceso.

Una de las empresas más comprometidas con este proyecto es SACYR que en sus diferentes plantas de reciclado procesa anualmente más de 25000 toneladas. Esto supone un 10 % de la totalidad que se manda a los vertederos cada año.

Qué productos se pueden elaborar

El caucho reciclado tiene múltiples aplicaciones. Se está empleando mucho para la fabricación de granulados de caucho que se utilizan en pistas deportivas para la elaboración de suelos e incluso en parques infantiles.

Otra aplicación, cada día más extendida, es la que tiene en la construcción de autopistas y carreteras. Se trata de un producto innovador que se utiliza en la propia fabricación de los productos asfálticos dotando al pavimento de una mayor elasticidad y agarre.

El reciclaje de neumáticos no solo es una necesidad, sino una buena oportunidad para las empresas de participar en desarrollos industriales que favorezcan la economía circular. Aún quedan múltiples aplicaciones como sus propiedades de aislamiento con grandes campos de negocio y que todavía no están lo suficientemente investigados. Todo ello con una materia prima gratuita que está esperando una segunda vida.