¿Cómo alargar la vida útil de tus neumáticos?

Tus neumáticos son uno de los elementos más importantes a la hora de conducir tu vehículo. No en vano, tus cubiertas constituyen el principal punto de contacto entre la carretera y tu vehículo, algo que provocará el inevitable desgaste del caucho. Sin embargo, desde muchoneumatico.com queremos mostrarte distintas fórmulas y pequeños trucos con los que podrás salvaguardarlo y estirar la vida útil de tus neumáticos hasta límites insospechados.

Presión de los neumáticos

Sin duda uno de los elementos más decisivos a la hora de que tus neumáticos duren más es la de conducir con la presión correcta de tus neumáticos. Una presión que deberíamos ajustarla no sólo a las especificaciones del fabricante sino también a la carga o, lo que es lo mismo, al números de personas que ocupan regularmente el vehículo.

Rotación de los neumáticos

Si deseamos que nuestros cuatro neumáticos se desgasten de manera homogénea la mejor opción es rotarlos dependiendo de cómo se vayan desgastando. Los expertos recomiendan realizar esta rotación cada 10.000 o 15.000 kilómetros.

Evitar la conducción brusca

Junto a la rotación y presión de las cubiertas, otro de los elementos indispensables a la hora de conseguir alargar la vida útil del neumático es el de evitar una conducción brusca que afectará con un mayor desgaste de la banda de rodadura. Evitar frenadas y aceleraciones bruscas o la toma de curvas a gran velocidad incrementará la esperanza de vida de tus cubiertas.

Tipología del vehículo

Existen coches que gastan más caucho que otros. Así pues si tienes un vehículo de mucho peso y mucha potencia se hará más difícil hacer durar más los neumáticos. También tendrá incidencia la capacidad de almacenar barro y suciedad de ruedas y guardabarros, lo cual también influirá en un mayor desgaste de las cubiertas.

No descuides los tapones

Aunque parezca algo secundario, los tapones y válvulas de tus neumáticos protegerán el mantenimiento de una correcta presión de tus neumáticos. Procura que hagan un cierre adecuado, que no estén pasados de roscas y si extravías alguno de los cuatro tapones reponlo de manera rápida.