Land Rover patenta un sistema de inflado de neumáticos según su uso

Los sistemas automáticos de inflado de neumáticos no son algo novedoso en la actualidad. Existen en diferentes campos de la motorización como el de la alta competición o el de la tecnología militar. Sin embargo la marca Land Rover ha querido desmarcarse de estos sistemas de inflado clásicos para ir un paso más más allá.

La novedad que plantea la marca británica de vehículos todoterreno y 4×4 es la de un sistema inteligente de control de presión de neumáticos -TPMS- el cual posee la peculiaridad de adaptar la presión de las cubiertas dependiendo del uso y tipo de terreno por el que se va a circular, pudiendo así inflar o desinflar el neumático según sea necesario.

Este sistema, sobre el que posee los derechos de patente Land Rover, funciona a través de una central electrónica instalada en el cuadro de mando del vehículo el cual controla en todo momento la presión de las ruedas y pudiendo adaptarlas a diferentes modalidades de conducción, que en el caso del TPMS ha catalogado en cuatro modalidades: en carretera, fuera de pista, económico y de recuperación, cada una de ella con una presión de inflado diferente.

Entre otras ventajas, el sistema TPMS permitirá alargar la vida útil de los neumáticos gracias a los ajustes de presión a medida que se vaya desgastando la cubierta, lo que permitirá corregir descompensaciones

Sistema automático o manual

Este sistema TPMS desarrollado por Land Rover posee otro tipo de peculiaridades como la posibilidad de adaptar y regular la presión manualmente de los neumáticos si detectamos que la presión en un determinado momento es demasiado alta o baja. Desde el equipo de desarrollo de ingenieros de la marca británica aseguran que entre otras ventajas permitirá alargar la vida útil de las cubiertas, ya que el sistema podrá ajustar la variaciones de presión que se vayan produciendo por el desgaste del caucho, con lo que podrá ir corrigiendo determinadas descompeNsaciones que se produzcan en válvulas y juntas.